7 mar 2016

Hoy charlamos con... Juanra



Juanra Doral

Hoy he quedado a desayunar con Juanra. Es sábado y el sol calienta la terraza donde hemos quedado. Llego un pelín tarde, cinco minutitos de nada, y ya está esperándome. Me recibe con su sonrisa, y es que Juanra es de esa gente que siempre anda sonriendo,  tengo la sensación de que es de esos tipos que consiguen que la vida de los demás sea más fácil.

Sobre la mesa: un cola-cao, “El nombre del viento” de Patrick Rothfuss y una peli, que le ha comprado a sus hijas, “Moulin Rouge". 
-¿y esto, Juanra? 
-Mis hijas que la han rayado de tanto verla. (sonríe)


Estamos en una terraza donde hay música ambiente y al son de la “Bohemian Rhapsody” de Queen empezamos a hablar sobre nuestro blog. 


Él es el artífice de que podamos leerlo. Le propuso la idea a Aidén y a Cristina y ellas no dijeron que no. Sin que nadie me lo ofreciera me apunté al carro para echar una mano porque a veces tengo épocas en las que las ideas fluyen con mucha rapidez y tengo que expresarme como sea, sobre todo por miedo a que me de un “chungo”.  Entre mi poca paciencia y que soy como un torbellino, este buen hombre tiene que aguantarme, pero me pone firme, ¿eh? no os creáis que se calla. 


Suenan nuestros móviles a la vez, correo de Aidén, que no descansa ni los fines de semana y como bien dice Juanra es como una hormiguita, constante, que está continuamente pensado en nosotros y en Bodouakro. Así es casi imposible que algo salga mal. Hemos recibido carta de nuestros ahijados y nos enseñamos las fotos. Yo no puedo saber qué es lo que Khoissan me cuenta aún porque hasta que no llegue a casa y pille mis apuntes de francés y el diccionario no podré traducirla, cosa menor si lo comparamos con el currazo que se pega François que según Juanra “obra milagros” en el campamento. Campamento que está en “un continente desconocido, olvidado, tan injustamente gobernado que impide que sus gentes sean felices”, añade. No le falta razón (le contesto) pero al menos ahí estamos nosotros y como nosotros muchos que arriman sus hombros para que estas personas tengan un presente más llevadero. Asiente y me pone como ejemplo a Cristina, “guerrillera, soñadora e idealista. La ‘llama’ de Bodouakro.” Está seguro de que liderará muchos más proyectos y que tendrá éxito. Y ahí estaremos ‘los padrinos’ a los que nos define como: personas normales que, a falta de dar nuestra vida por los demás, al menos dedicamos una pequeña parte de nuestro dinero a llevar un poco de esperanza a los peques.


Se acerca el mediodía  después de tres cafés, sí, yo he tomado café. Nos despedimos y mientras me voy a buscar a María, otra madrina con la que he quedado a comer, pienso que he desayunado con un hombre que tras esa sonrisa perenne, que fue feliz en su infancia con sus cinco hermanos  y sueña con ser libre, en esta vida tiene la misión de  proteger y ayudar a los que le rodean.

2 comentarios:

  1. Muchas gracias Bodouakro por traernos las impresiones de Juanra. En verdad, este blog no hubiera sido posible sin él. Un gran padrino, pero ante todo, una gran persona.

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